Cuando utilice piscinas se recomienda revisar estos aspectos:
El agua:
- Debe ser transparente y se debe ver un disco negro colocado sobre el fondo de la piscina.
- Debe estar libre de materias flotantes y espuma, y no debe existir suciedad en el fondo.
- Debe ser desinfectada con cloro.
Debe existir una franja reservada para la circulación de los bañistas, de material impermeable, lavable, antideslizante, sin desniveles y en buen estado, de un ancho no inferior a 1,20m.
Debe tener duchas para usarlas antes de ingresar a la piscina.
Prohibición de consumo de alimentos o bebidas en la franja reservada para la circulación de los bañistas o dentro de la pileta.
Marcas indicadoras de profundidad en los costados, claramente visibles.
Servicios higiénicos y duchas en buen estado de funcionamiento y aseo.
Presencia de salvavidas entrenados en forma permanente durante el funcionamiento de la piscina.
Prohibición de entrar a la piscina con vasos, botellas, alimentos y animales.
Escalerillas para entrar y salir en buen estado.
Las piscinas que cuenten con toboganes deberán informar al público, a través de carteles u otro medio, las restricciones de uso de los mismos, así como la indicación del tipo de usuario para el que fue diseñado.